La construcción hecha con volúmenes blancos y piedra se viste con las llamativas cornisas de madera de diseño impecable. Se trata de estructuras hechas con vigas laminadas teñidas en nogal que destacan sobre el fondo blanco dando al diseño moderno un aire artesanal.
En el interior se repite la combinación de las vigas laminadas oscuras sobre el panel aislante Thermochip Lasur blanco, una estética nada convencional para los espacios de techos altos y arquitectura diáfana.
La tarima de Tarkett Roble Rústico Heritage instalada en la planta superior aporta un toque cálido y antiguo que contrasta con las modernas puertas lacadas blancas. Un hogar ecléctico muy personal que entremezcla claros y oscuros, el diseño contemporáneo y el rústico, ayer y hoy.